Amanda, ¿Qué fue lo que hizo que te dedicaras a la moda?
Siempre he querido trabajar en algo relacionado con la comunicación y el cuerpo, y considero que la moda es la herramienta principal que nos ayuda a comunicarnos a través de nuestro estilo, nuestra personalidad y nuestra manera de ver el mundo.
¿Qué es lo que más te inspira?
Me gusta pensar que formo parte de una nueva generación que trabaja tanto individual como grupalmente para conseguir cambios positivos y sostenibles dentro de la industria de la moda. También encuentro inspiración en la cultura, el arte y la música contemporánea.
Has tenido la oportunidad de presentar tus colecciones en las Semanas de la Moda de Estocolmo, Copenhague y París. ¿Qué sientes ahora que has ganado este premio?
¡Me siento fenomenal! Me siento muy orgullosa de haber tenido esta oportunidad. Ha sido una plataforma increíble para darme a conocer en todo el mundo. Una experiencia que me ha puesto a prueba y me ha hecho crecer como diseñadora.
¿Cómo abordaste inicialmente el Proyecto Trend Award?
En un principio comencé trabajando en 3D, desarrollando mis propias muestras en fino metal y en papel. Estudié las luces de la ciudad y los diferentes juegos que se crean en la cámara en movimiento durante la noche. De esta forma conseguí inspirarme para comenzar a desarrollar mis diseños.
¿Cómo te inspiraron las luces de la noche?
Me gusta la idea de que la noche y la ciudad poseen un ritmo propio lleno de audacia y con una poderosa primera impresión. Intenté evocar el efecto de las luces de neón de una fiesta a través de la luminosidad y los colores con reflejos, que es algo con lo que no suelo trabajar, así fue algo emocionante en lo que adentrarme, ¡por partida doble!
En efecto se trata de un look muy osado, aparentemente apto sólo para mujeres que se desmarcan de la multitud. ¿Se trata de algo con lo que te identificas?
¡Sí! En realidad mis diseños suelen ser algo atrevidos en general. Me encanta marcar la diferencia, tanto en mi trabajo como a nivel personal con mi forma de vestir y de actuar.
¿Y cómo fue trabajar mano a mano con Oriflame?
Katrin Romare (Responsable de Diseño de Accesorios de Oriflame) y todo el equipo de Oriflame en general me brindaron todo su apoyo. Me invitaron a una sesión inicial para testar mis ideas y me dieron libertad para desatar toda mi creatividad. Creyeron en mí y en mi trabajo desde el principio hasta el final.
Oriflame está presente en más de 60 países en todo el mundo. ¿Es algo que tuviste en cuenta a la hora de diseñar tus piezas?
Por supuesto. Creo que mis diseños poseen unas líneas limpias, con cierto toque clásico, pero trabajadas de una manera más innovadora. Sus cortes y sus formas están creadas para encajar con un amplio rango de edades y para adaptarse a diferentes estilos.
¿Crees que tus diseños reflejan tus orígenes suecos?
Absolutamente. Creo que esas mismas líneas y formas están relacionadas con esa idea de “estética nórdica” tan extendida. Además, las piezas también presentan una gran versatilidad al poder lucirse con diferentes look y eso también está relacionado con un concepto de diseño sostenible y una corriente de pensamiento muy Sueca.
Tu colección es muy versátil. ¿Cuál es tu look favorito?
Me encanta la forma en la que la cadena metálica del bolso puede lucirse como collar, junto con un foulard o simplemente en el propio bolso, luciéndolo cruzado.
¿De qué pieza estás más orgullosa?
En concreto del bolso negro porque creo que une a la perfección lo clásico con lo moderno. Toda la colección proporciona una sensación de confianza y de estilo realmente visionario. Estoy muy contenta con el resultado final.