1. BAÑO DE PIES
Los baños de pies no solo son relajantes sino que dejan los pies sensacionales. Vierte agua caliente en una palangana y añade un chorrito de baño para pies. Sumerge los pies durante 10 minutos y notarás la diferencia.
2. ADIÓS ASPEREZAS
Con la piel aún reblandecida por el efecto del agua caliente, coge una lima de pies o una piedra pómez y lima las asperezas y las callosidades. Suelen encontrarse en los talones, en el lateral exterior del pulgar y en su base. Una vez suavizada la piel, aplica un exfoliante específico para eliminar las células muertas.
3. HIDRATACIÓN PROFUNDA
Llegado este momento, los pies necesitan una buena dosis de hidratación para evitar grietas y prevenir su deshidratación. Existen muchas cremas de pies por las que decantarse, así que selecciona la que mejor se adapte a tus necesidades. Si tiendes a la sequedad, opta por una crema densa, aplícala preferiblemente antes de dormir y ponte los calcetines hidratantes para potenciar su efecto mientras duermes. Pero si tu problema es el olor, deberás elegir una crema de pies antitranspirante.
4. CORTAR Y PINTAR
Las uñas de los pies deben cortarse rectas, para evitar que se encarnen. Procura dejar siempre una fina franja blanca. Termina usando una lima para unificar y suavizar su borde. Como remate final, elige un color de esmalte de uñas para obtener un resultado de pedicura profesional y recuerda siempre aplicar primero una base protectora sobre la uña para evitar su decoloración, y un brillo protector al final para prolongar el acabado del esmalte de color.
5. BUEN OLOR
Seamos sinceros, a cualquier le pueden oler los pies, especialmente en verano. Pero por eso, contamos con diversos sprays antitranspirantes que te evitarán más de una situación embarazosa. Revitalizantes, con efecto refrescante y aromas deliciosos. ¡Sus resultados están clínicamente probados!