¿En qué consiste esta técnica?
Mientras que el contouring se centra en esculpir el rostro a través de las sombras con el bronceador y el maquillaje, el strobing consiste en lograr una piel ligeramente luminosa y barnizada a base de iluminador en puntos clave del rostro.
¿Cómo se consigue?
Lo mejor de esta técnica es lo fácil que es. Comienza con una piel bien hidratada. Aplica un iluminador potente en las zonas en las que el sol incide sobre tu rostro de forma natural: encima de las cejas, en los pómulos, en el tabique de la nariz, en el arco de Cupido y en el centro de la mejilla.
¿Cómo se usa un iluminador?
Elige un iluminador con brillo perlado pero sin brillantina, quieres un look fresco, no ser una bola de discoteca. Iluminadores cremosos son ideales para esta técnica. Si tienes la piel clara, elige un iluminador con subtono rosa. Las pieles oliva y bronceadas quedan muy bien con subtonos dorados, como es el caso de Jennifer Lopez y GiGi Hadid. Si tienes la piel más oscura, te quedarán bien los subtonos teja. Si tu piel es grasa y te preocupan los brillos, utiliza iluminador en polvo.
Strobing, la nueva técnica de maquillaje tras el contouring
Si en 2014 fue el año del contouring, 2015 terminará dominado por la técnica del strobing. Si es la primera vez que oyes algo de esto, tomo nota.