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1
Aplica una capa generosa del esmalte blanco. Nosotros te recomendamos aplicar dos capas para una cobertura total. |
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2
Elige 3 colores en tonos súper potentes. Nosotros apostamos por el fucsia, el verde menta y un amarillo lima. Deja caer varias gotas de los esmaltes sobre un platito u otra superficie que actuará como una paleta. Con ayuda de un pincel con forma de abanico, moja la esquina en un color y aplícalo sobre la uña en un solo trazo. Déjalo secar. |
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3
Limpia el pincel que has utilizado con ayuda de un quitaesmalte antes de que se quede duro y se dañe el pincel. Utiliza la misma técnica de antes sobre otro olor, y por último sobre un tercero. |
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4
Un vez que se hayan secado todos los colores, sella el esmalte con una base transparente. |
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