1. ACEITE
Si quieres que el acabado de tu maquillaje resulte fresco y jugoso, debes comenzar aplicando un aceite facial ligero e hidratante sobre el rostro limpio. Caliéntalo entre las manos y extiéndelo con un suave masaje. No sólo proporcionarás a la piel una dosis extra de hidratación, sino que harás que el maquillaje se extienda mejor.
2. PRE-BASE
Para conseguir un efecto ultra-suave, recomendamos aplicar una pre-base antes del maquillaje. La pre-base prepara la piel para el maquillaje, rellenando las finas líneas y suavizando la apariencia de los poros. Extiéndelo con los dedos y ten cuidado con la cantidad de producto que aplicas. Una pequeña cantidad del tamaño de una pasa es suficiente para extenderlo por todo el rostro.
3. MAQUILLAJE
Para terminar, aplica la base de maquillaje mediante pequeños toquecitos en las mejillas, la frente, la barbilla y el puente de la nariz. Utiliza una brocha específica para extenderlo de forma suave y uniforme, hasta lograr la cobertura deseada. Habrá zonas de tu piel que necesiten una mayor cobertura que otras así que, puedes usar una esponjilla para cubrir las imperfecciones, las marcas de acné, las rojeces o las ojeras.
¡Y listo! Tu base ya luce perfecta para continuar con tu maquillaje.
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