1. Márcate sólo objetivos realistas
No tengas prisa por perder muchos kilos antes de las vacaciones de verano. Cortar la ingesta de calorías por lo sano sólo ralentizará tu metabolismo: no es bueno ni para ti ni para tu salud ya que no es una solución sostenible a largo plazo. En lugar de esta idea, márcate objetivos reales y date el tiempo necesario para conseguirlos.
2. La rutina, tu nueva amiga
Planificas reuniones, citas y quedadas con amigos ¿verdad? Entonces podrás hacer lo mismo con tus ejercicios. Deja tiempo en tu rutina semanal para una clase del gimnasio, una caminata enérgica o incluso ponte unos videos en internet.
3. Una piel que reluce
¿Quieres una luz especial este verano en tu piel? Yo sí! Activa la circulación de tu piel cada día con un sistema de limpieza facial. Utiliza un exfoliante facial dos veces a la semana para mejorar la luminosidad y unificar el tono.
4. Elige bien el color de tu comida
Embellece tu cuerpo desde el interior. Las frutas de colores intensos como los tomates y las cerezas son una fuente rica de antioxidantes. Y las Vitaminas A y C que son las responsables de una piel luminosa se encuentran en las verduras verdes como el brócoli.
5. Disfruta del buen tiempo
Si hace un día precioso, pasa del gym y haz tu propia actividad al aire libre. Aprende a jugar al padel, nada o haz running. ¡No olvides ponerte protección solar!
6. Pasa de lo artificial
Si quieres entrar en ese bikini que tanto te gusta, lo último que tienes que hacer es ser una apasionada de las bebidas con gas. Evita aditivos artificiales que se encuentran en la comida y las bebidas sin azucares. El alcohol, las bebidas con gas y los chicles son un NO rotundo.
7. No te juzgues en exceso
En lugar de compararte con modelos, céntrate en tu cuerpo. Si estas comiendo de forma saludable, haces ejercicio con regularidad y estás en tu Índice de Masa Corporal (IMC) recomendado, entonces no hay lugar para que te juzgues tan duramente. ¡Un cuerpo saludable es un cuerpo bello!
